martes, 23 de enero de 2024

El proceso del conocimiento: razón y experiencia

1. Introducción

Hay dos cuestiones que preocupan a la filosofía desde sus orígenes. Por una parte, la existencia de un mundo físico real e independiente de la experiencia. Por otra parte, como cuestión fundamental en teoría del conocimiento, una vez afirmada la existencia del mundo, cómo se llegan a conocer sus características y cómo se puede determinar la verdad o precisión de ese conocimiento.

Nuestro conocimiento está codificado por el lenguaje. Éste es el instrumento del que disponen los seres humanos para transmitir e interpretar lo que se conoce. Nos vamos a plantear si es posible pensar o conocer sin tener un lenguaje o si nuestra lengua determina la forma en que interpretamos el mundo.


2. El conocimiento hasta la Edad Moderna: lo universal

De los griegos a la Edad Moderna, el conocimiento es conocimiento universal:

1) En Platón, es un proceso de superación de la información de los sentidos (apariencias) hasta alcanzar las ideas, que son universales y están separadas tanto del individuo que conoce como de las cosas.

2) Para Aristóteles, el conocimiento sigue siendo universal, pero ahora el entendimiento abstrae los rasgos universales a partir de la experiencia particular de los objetos del mundo.

3) En la Edad Media, la preocupación en torno al conocimiento fue la de elaborar esos juicios universales y necesarios.

El conocimiento de la realidad no estaba mediatizado por el sujeto, que se limitaba a recibir pasivamente la información que proporcionan los sentidos. Fue en la modernidad cuando se introdujo la idea de que el conocimiento era resultado de la actividad del sujeto.


3. Dos posturas en la Modernidad: la razón y los sentidos

La aproximación moderna a la idea de conocimiento parte de su comprensión como un proceso en el que intervienen dos elementos: un sujeto, que conoce, y un objeto, que es conocido.

Hay que tener en cuenta, por un lado, las características físicas de los objetos y, por otro, la estructura fisiológica de quien percibe. Muchos animales no ven el color porque no tienen sentidos receptores con los pigmentos adecuados. La percepción del color es una capacidad que en el proceso evolutivo ha aparecido en muchas especies y ha desaparecido en otras.

Los humanos vemos el mundo con una amplia gama de colores, lo que determina nuestra forma de describir, entender y movernos en nuestro entorno. Ahora bien, si ocurre lo mismo con el resto de percepciones de la realidad, ¿vemos el mundo tal como es o tal como somos capaces de verlo?

En el pensamiento moderno, el empirismo y el racionalismo propusieron dos explicaciones divergentes a la cuestión de cómo conocemos:

1) Para el empirismo, el conocimiento comienza y termina con la experiencia, a partir de la información que proporcionan los sentidos.

Los empiristas parten de la idea de que la mente humana es como una página en blanco sobre la que se imprimen todos los conocimientos a partir del contacto con la realidad. Hume distingue entre dos tipos de percepciones: las impresiones, que son inmediatas a la observación del objeto, y las ideas simples, o copias de las impresiones. Las ideas más complejas y abstractas se forman a partir de la asociación de las simples, según unas leyes determinadas.

El empirismo es muy restrictivo con las ideas a las que no corresponde ninguna impresión, como, según Hume, la de causa o la de sujeto.

2) El racionalismo fue la tradición filosófica dominante durante los siglos XVII y XVIII.

Todos los racionalistas comparten la confianza en la razón como el instrumento de los seres humanos para descubrir los procesos que ocurren en la realidad. Los sentidos tienen un papel secundario.

La mente construye la realidad mediante la actividad de la razón, al elaborar las ideas. Por ello, Descartes desconfía de la información sensorial, y busca las ideas innatas (con las que nacen todos los sujetos) y en las que se funda el verdadero conocimiento.

3) Por su parte, Kant plantea una posición conciliadora, de acuerdo con la cual admite con los empiristas la necesidad de la experiencia para conocer, pero coincide con los racionalistas en señalar que el entendimiento aporta conceptos puros, vacíos de contenido empírico, en el proceso de conocimiento.

Para Kant, los sentidos aportan el material del conocimiento, pero es la razón humana quien lo organiza de una forma determinada, común para todos.

Así, establece unas relaciones muy complejas entre sujeto cognoscente y objeto conocido. El sujeto conoce la realidad participando activamente en el proceso, de tal modo que impone sus estructuras mentales al mundo. Por lo tanto, en el conocimiento intervienen ineludiblemente los dos elementos: la razón y los sentidos.

Este debate filosófico está en la base de las modernas investigaciones acerca del conocimiento o de la relación entre lenguaje y pensamiento. Las neurociencias y la psicología han tratado de dar respuesta a esta vieja cuestión de cómo a través de los sentidos nos relacionamos con el mundo. Al mismo tiempo, la sociología y la antropología han tratado de dilucidar la determinación social del conocimiento humano.


Almendro en flor (Van Gogh), Museo Van Gogh de Ámsterdam: El sujeto humano participa activamente en la construcción del conocimiento, pues organiza la información de los sentidos mediante la razón.

lunes, 22 de enero de 2024

David Hume (1711-1776)

Filósofo escocés que defendió la importancia de la experiencia como fuente de todo conocimiento. Destacó el valor de la costumbre en muchos de los conocimiento habituales. Criticó muchos de los conceptos de la metafísica clásica e hizo de la práctica de la duda y del escepticismo una guía para el conocimiento y la acción. Fue uno de los más notables representantes del empirismo británico.